La vida hogareña gira en torno al comedor, ya sea éste un salón independiente o lo tengamos integrado en la propia cocina. En este lugar damos los buenos días, desayunamos; algunos volvemos para almorzar; otros volvemos con muchas ganas al final del día; en ocasiones, el insomnio hace que lo visitemos a altas horas de la madrugada para tomarnos un vaso de leche caliente... Lo que quiere decir esto es que el comedor es una de las estancias en donde más tiempo tenemos que invertir, en cuanto a decoración y búsqueda de servicio se trata.

Los colores, el tipo de mobiliario, el ambiente en que nos inspiremos, etc. Son factores importantes para que nuestro comedor sea un lugar lleno de vida y confort.

Los metros cuadrados; si se trata de un comedor independiente o si por el contrario, está integrado en la misma cocina; si nuestra casa es un loft y disponemos de un espacio totalmente diáfano; si vivimos solos, en pareja o somos una gran familia... Todo ello debemos valorarlo cuando decidamos el estilo que queremos utilizar para su decoración. Lo que está claro, es que sea como sea nuestra casa, las opciones son infinitas en cuanto a crear y diseñar nuestro comedor con estilo, color y vitalidad y sobre todo, procurando que nos preste un buen servicio.

En este post queremos enseñaros comedores totalmente diferentes pero con un punto en común: coloridos, llenos de vida y que nos han conquistado.

Sencillez y notas de color.

Rojo y rosa. una combinación arriesgada pero, en este caso, muy acertada.

Comedor y cocina. Dos estancias diferentes compartiendo un mismo espacio.

En zonas de paso o integrados en la sala de estar.

Una zona de comedor luminosa y original que además está totalmente integrada con la zona de estar, ya que la mesa se encuentra junto a la librería y las sillas se combinan con el banco alargado. Los cojines le dan el toque perfecto para crear un ambiente cómodo.

Fotografías: Pinterest.

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