En un maravilloso edificio construido en 1888 nos encontramos un impresionante apartamento de 3 habitaciones, un hogar de estilo nórdico,  acogedor y que mantiene la esencia neo-renacentista de cuando se levantó el edificio. Lo vemos en los rosetones de sus altos techos, en el ventanal junto al cual se ha creado una zona de lectura preciosa, o en la magnífica chimenea antigua que calienta del hogar.

Un apartamento, sin duda, decorado y pensado para gente muy casera, su estructura señorial combina a la perfección con otros elementos decorativos originales y contemporáneos como las ilustraciones de la pared del escritorio. Piezas de inspiración escandinava, como la mítica silla 'balancín Eames', de inspiración vintage y de líneas más rústicas. Una combinación de estilos que da como resultado un ambiente relajado y una atmósfera familiar y confortable.

Colores totalmente neutros para no alterar la paz y la serenidad que se respiran en cada una de las estancias de este hermoso apartamento de Gotemburgo.

Balancín Rocking Eames, Scandi

Vía.

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